Sombra aquí, sombra allá...
Algunos analistas han querido maquillar al igual que los medios de comunicación la situación del país en la actualidad, sin embargo estos intentos no han prosperado.
México ya no puede ocultar los últimos sucesos, lo cual por una parte da gusto ya que no nos tapan las malas noticias con un “chupacabras”, un “asesinato múltiple” o algún otra historia que no sirve más que para desviar la atención de los ciudadanos libres y soberanos, sin embargo esto también nos ha quitado la oportunidad de reaccionar ante lo que vendrá, al menos antes te daban un “conteo descendiente” con estos sucesos y sabías que “algo grave va a pasar”.
Para los que todavía no lo entienden dejen poner el más claro ejemplo, el mito del “Chupacabras”, este extraño ser que sirvió solamente para cubrir el asesinato de Colosio en el 94, al igual que cubrió la devaluación del 1000% que sufrió el país, o creen que ¿sólo por comodidad se quitaron esos ceros de nuestro sistema monetario?
Bueno hace poco los gobernantes quisieron volver a utilizar esta sombra tan de moda en el ’94, y nos llegó directo del imaginario mexicano la historia tan increíble de los tres náufragos, esos que llegaron a Australia después de nueve meses en el mar, pero a pesar de toda la cobertura a este suceso, de estar contando los días y minutos por parte de los medios masivos para su entrada triunfal en el maravilloso puerto de San Blas, a pesar de todo eso el suceso pasó desapercibido ante la ola de problemas que afectan al país, AMLO, APPO, Ejecuciones en Monterrey, inundaciones, entre otros, el pueblo mexicano creyó en un “chupacabras” pero ¿creer en tres mexicanos que sobrevivieron nueve meses en el mar? está claro que no, síntoma de que estamos avanzando. Hay que recordar lo que dice Marx señores: El pueblo que no conoce su historia está destinado a repetirla (palabras más, palabras menos).
Entonces queda claro que los mexicanos ya no nos tragamos estos cuentos tan fácilmente, aunque ahora se lo ha tragado nuestro vecino del norte, el cual ya compró los derechos de la historia y en exclusiva producirá series de televisión, libros, películas y un sin fin de cosas sobre una historia real mexicana.
Ya no estamos para maquillar la realidad, ahora estamos para “Reality Shows” señores.
México ya no puede ocultar los últimos sucesos, lo cual por una parte da gusto ya que no nos tapan las malas noticias con un “chupacabras”, un “asesinato múltiple” o algún otra historia que no sirve más que para desviar la atención de los ciudadanos libres y soberanos, sin embargo esto también nos ha quitado la oportunidad de reaccionar ante lo que vendrá, al menos antes te daban un “conteo descendiente” con estos sucesos y sabías que “algo grave va a pasar”.
Para los que todavía no lo entienden dejen poner el más claro ejemplo, el mito del “Chupacabras”, este extraño ser que sirvió solamente para cubrir el asesinato de Colosio en el 94, al igual que cubrió la devaluación del 1000% que sufrió el país, o creen que ¿sólo por comodidad se quitaron esos ceros de nuestro sistema monetario?
Bueno hace poco los gobernantes quisieron volver a utilizar esta sombra tan de moda en el ’94, y nos llegó directo del imaginario mexicano la historia tan increíble de los tres náufragos, esos que llegaron a Australia después de nueve meses en el mar, pero a pesar de toda la cobertura a este suceso, de estar contando los días y minutos por parte de los medios masivos para su entrada triunfal en el maravilloso puerto de San Blas, a pesar de todo eso el suceso pasó desapercibido ante la ola de problemas que afectan al país, AMLO, APPO, Ejecuciones en Monterrey, inundaciones, entre otros, el pueblo mexicano creyó en un “chupacabras” pero ¿creer en tres mexicanos que sobrevivieron nueve meses en el mar? está claro que no, síntoma de que estamos avanzando. Hay que recordar lo que dice Marx señores: El pueblo que no conoce su historia está destinado a repetirla (palabras más, palabras menos).
Entonces queda claro que los mexicanos ya no nos tragamos estos cuentos tan fácilmente, aunque ahora se lo ha tragado nuestro vecino del norte, el cual ya compró los derechos de la historia y en exclusiva producirá series de televisión, libros, películas y un sin fin de cosas sobre una historia real mexicana.
Ya no estamos para maquillar la realidad, ahora estamos para “Reality Shows” señores.
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