Agua que no has de...

Estaba tratando de ver la televisión con la simpleza de un niño de 6 años, sin todo lo que la carrera me enseñó sobre los medios masivos.

Me trataba de concentrar en disfrutar la preciada televisión abierta de nuestro país cuando de la nada el noticiero de las ocho de la noche se convirtió en algo peor que una película de terror hollywoodense, extrañamente los camarógrafos habían captado en pantalla el momento preciso en donde un hombre se aventaba al vacío para darse muerte a sí mismo, sin importar el dolor de la familia, el respeto a la vida y el respeto a un ser humano lo pasaban a las ocho de la noche por un canal de televisión abierta, así es, abierta a todo público, a toda edad, a todo nivel social y sobre todo a toda morbosidad y amarillismo.

He tratado de encontrar justificación a que los Medios Masivos se encuentren en la etapa más amarillista de los tiempos, son choques con fuertes escenas, son personas prensadas en camiones, son charcos de sangre y cabezas rodando en el suelo de un antro, es una niña violada explicando cómo sucedió y llorando frente a una cámara.

Es la ética de un profesional del periodismo que no puede inmiscuirse en la vida real, que ve todo a través de papel, de computadoras, de cámaras de televisión, de grabadoras de mano que no hacen más que reproducir los sonidos extraños que al juntarlos es la historia de desamparo y dolor de una anciana de 69 años que tiene que salir adelante, pero el periodista, ¿qué escucha el periodista?

No se si los medios han perdido el sentido de consciencia social o si la gente ha perdido la capacidad de responder a estímulos externos y es por esto que los medios han tratado de crear consciencia con imágenes sacadas de la realidad, con la única finalidad de producir una reacción en la gente que vive envuelta en una esfera de cristal, lejos de esta realidad.

Mis preguntas en este caso serán ¿es válido mostrar al mundo tal cual es, porque una cosa son las noticias y otra saber los accidentes y mostrar el sangrerío?, ¿es realmente justificante hacerte partícipe de la muerte de un hombre?, ¿posee alguna justificación enseñarle a un niño de seis años (o a cualquier persona) cómo se ve en la realidad el último suspiro de un ser humano?

Y pensar que todo esto surgió por querer apreciar la televisión desde un punto de vista infantil, porque algo es ver la muerte en las caricaturas o películas y otra muy diferente entender porque no pueden salvar a una mujer atrapada en un incendio y tratar de explicarte porqué toda esa gente que está ahí grabando no puede hacer nada por ella... si sólo hubieran llegado cinco segundos antes...

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